Moda-Artìculo Tribus Japonesas. Por Karen Luna Lortia.
Japón es conocido por ser la cuna del manga y el anime. Desde la aparición de éstos, se ha preocupado por crear historietas y dibujos animados para todo público. Ser Otaku es tener un estilo de vida diferente; ser aficionado a alguna actividad o tema en específico. El término existe desde hace mucho, pero fue hasta 1982 que comenzó a utilizarse de manera más frecuente en la jerga japonesa.
Un Otaku se encuentra inmerso en ese mundo fantástico. Es común que dedique horas enteras a su afición ya que a diferencia de la opinión de la mayorìa, para él no representa una pérdida de tiempo. Ser uno de ellos no es fácil, pues muchas personas suelen creer que los dibujos animados son sólo para niños, siendo este pensamiento la primera barrera a derribar.
Representan una forma de vida, escapar de la realidad hacia un mundo fantástico donde todo es posible y las batallas por honor son la orden del día.
Suelen vivir en la frontera entre lo real y lo ficticio. Tienen la capacidad de convivir con seres de otra dimensiòn e incluso traerlos a la vida cediendo por un momento el propio cuerpo en una pràctica llamada “Cosplay”. Èsta consiste en crear la mejor representación posible en uno mismo de algún personaje. Para un Otaku, portar la vestimenta de sus dibujos animados favoritos y convertirse en uno de ellos unos instantes, es motivo de orgullo, por lo cual se esmeran por asemejarse lo màs posible. Como resultado, se obtienen a veces rèplicas casi exactas, pues es primordial imitar tambièn su actitud.
Un Otaku se encuentra inmerso en ese mundo fantástico. Es común que dedique horas enteras a su afición ya que a diferencia de la opinión de la mayorìa, para él no representa una pérdida de tiempo. Ser uno de ellos no es fácil, pues muchas personas suelen creer que los dibujos animados son sólo para niños, siendo este pensamiento la primera barrera a derribar.
Representan una forma de vida, escapar de la realidad hacia un mundo fantástico donde todo es posible y las batallas por honor son la orden del día.
Suelen vivir en la frontera entre lo real y lo ficticio. Tienen la capacidad de convivir con seres de otra dimensiòn e incluso traerlos a la vida cediendo por un momento el propio cuerpo en una pràctica llamada “Cosplay”. Èsta consiste en crear la mejor representación posible en uno mismo de algún personaje. Para un Otaku, portar la vestimenta de sus dibujos animados favoritos y convertirse en uno de ellos unos instantes, es motivo de orgullo, por lo cual se esmeran por asemejarse lo màs posible. Como resultado, se obtienen a veces rèplicas casi exactas, pues es primordial imitar tambièn su actitud.
( Para ver artìculo completo http://www.cabaret.com/ )
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